Ya no se que es lo que quiero, o siempre lo supe, intercambié preocupaciones, incertidumbres, días que fueron hermosamente rutinarios, risas de otoño, todo ello lo intercambié por cajetillas de cigarros, noches solitarias, veranos grises y recuerdos rotos. Quizá intercambie lo que soy ahora por un una noche sin fin, donde me quede con su mirada y tal vez, sus ojos grandes y sonrientes reflejen lo que en el pasado eras en verdad para mi, pero te amaré, en otra vida o quizá nunca.
Palabra, Soledad
Aquí encontrarás poemas e historias un tanto malas, pero con un poco de encanto.